El pasado 20 de agosto al mediodía se declaró un incendio en el bingo de la calle Murrieta de Logroño, lo que llevó a cortar uno de los tramos más transitados de la ciudad en plena hora punta. El incendio, que se originó poco antes de las dos de la tarde en el falso techo del local —que se encontraba en obras—, generó una intensa humareda que sorprendió a conductores y peatones en la zona.
Hasta el lugar se desplazaron tres dotaciones de Bomberos de Logroño, junto con efectivos de la Policía Local y la Policía Nacional, que actuaron de inmediato para garantizar la seguridad y regular el tráfico. Como medida preventiva, se cortó el tramo entre la fuente de Murrieta y la rotonda de las Palmeras, provocando retenciones en una de las principales arterias de la ciudad.
Además, una ambulancia del servicio La Rioja Cuida acudió en labores preventivas, aunque por suerte no hubo heridos. La situación generó gran expectación entre vecinos y viandantes, que se agolparon en las inmediaciones para seguir la intervención de los equipos de emergencia. Aunque no se registraron víctimas, el suceso causó inquietud en una zona también marcada por obras en el edificio.